Hoy es un día diferente, Dios ha puesto en mi corazón que solamente escriba estas palabras que estoy seguro van a ayudar a muchas personas.
Hoy es el día que ha hecho el Señor, alégrate porque Dios está contigo, si ya le has entregado tu vida a Jesús, eres un hijo de Dios, Dios es tu Padre y si nosotros como padres imperfectos queremos darle buenas cosas a nuestros hijos, cuánto más Dios no nos va a dar lo mejor. Somos herederos de Dios y coherederos juntamente con Jesucristo. Todas las bendiciones de Dios nos pertenecen. Él es el que te toma de tu mano derecha y te dice: no temas, yo te ayudo. Él es tu fortaleza, tu escudo, tu paz, Él dice: yo estaré contigo todos los días de tu vida hasta el fin de los tiempos, no temas porque yo estoy contigo, no desmayes porque yo soy tu Dios que te esfuerzo, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia. No tengas miedo porque Dios no te ha dado espíritu de temor, sino de poder, amor y dominio propio. Dios te ha dado a su Espíritu Santo que es tu ayudador, Dios vive en nosotros, somos el templo del Espíritu Santo, él vivifica nuestro cuerpo mortal, nos da vida. No dejes que nada diga lo contrario, no dejes que nada te engañe. Sigue adelante, persevera, con la fe y la paciencia se heredan las promesas, las promesas de Dios son en él sí y amén. Dios no es hombre para que mienta ni hijo de hombre para que se arrepienta, él ha dicho y así lo hará, habló y lo ejecutará, su palabra nunca vuelve vacía, sino que hace aquello para lo cual fue enviada, así que sigue adelante confiando en el autor y consumador de tu fe, el justo por su fe vivirá, para el que cree todas las cosas son posibles, si crees verás la gloria de Dios, para Dios nada es imposible y si Dios está con nosotros, quién contra nosotros, ni la enfermedad ni ninguna otra cosa pueden contra el nombre de Jesús, el nombre de Jesús es sobre todo nombre, toda rodilla se doblará y toda lengua confesará que Jesús es el Señor, dime cuál es tu enfermedad y yo te diré que el nombre de Jesús es mayor, si tienes cáncer, el nombre de Jesús es mayor que el cáncer, si tienes sida, el nombre de Jesús es mayor que el sida, si tienes tuberculosis, el nombre de Jesús es mayor que la tuberculosis, sea cual fuere el nombre de tu enfermedad, el nombre de Jesús tiene mayor poder. No hay nada que no se someta al nombre de Jesús, pero tienes que creerlo porque sin fe es imposible agradar a Dios, no dice que puede ser que algo pase, dice que es imposible. Yo se que a veces las cosas se ponen muy difíciles, y las circunstancias dicen todo lo contrario, pero andamos por fe y no por vista, no mires tu cuerpo, mira a la palabra de Dios, no mires los síntomas, mira a la palabra de Dios, debemos tener la misma fe de Dios que llama a las cosas que no son como si fuesen. Diga el débil fuerte soy, el enfermo diga estoy sano. Tus palabras tienen poder, vida y muerte hay en el poder de la lengua y el que la ama comerá de sus frutos. Mira lo que hablas, pon atención a tus palabras. Son palabras de vida o de muerte. Persevera, si quieres vivir, Dios dice de larga vida te satisfaceré y te mostraré mi salvación. Dios no falla, Dios cumple sus promesas, él es el mismo ayer, hoy y por siempre. No dudes, porque el que duda es como la ola del mar que va de un lado a otro sin saber adónde va, el hombre de doble ánimo es inconstante en todos sus caminos. Si has decidido creerle a Dios, sigue adelante sin temor, sin dudas, sin miedo, solo creyendo en lo que Dios dice y no te distraigas con nada, ni por lo que diga tú médico, ni lo que diga tu cuerpo, los síntomas o lo que digan los demás. Solamente cree, NO TE HE DICHO QUE SI CREES VERÁS LA GLORIA DE DIOS. CREE SOLAMENTE, PARA DIOS NO HAY NADA IMPOSIBLE Y PARA EL QUE CREE TODAS LAS COSAS SON POSIBLES.
Si tienes a Jesús en tu vida, todas estas PROMESAS son para ti y te pertenecen, no hay nada que te pueda separar del amor de Dios. Pero si todavía no estás seguro de tener a Jesús en tu vida, solo necesitas tomar una decisión. Si crees que él está vivo hoy y que puede entrar en tu vida para cambiarla has esta oración de todo tu corazón.
Padre nuestro que estás en los cielos, este día me acerco a ti para proclamar a Jesús como mi Señor y Salvador, te pido que perdones todos mis pecados y que entres en mi vida. Te abro mi corazón para que entres y hagas de mí la persona que tú quieres que sea. Amén
Simplemente inspirador y bello.
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